Consejos de cuidado para mantenerse saludable
Brindar atención a un miembro de la familia que lo necesita es un antiguo acto de bondad, amor y lealtad. A medida que aumentan las expectativas de vida, los tratamientos médicos avanzan y un número creciente de personas vive más tiempo con enfermedades crónicas y discapacidades, más y más de nosotros participaremos en el proceso de cuidado.

Existen muchos tipos diferentes de situaciones familiares de cuidador. Podemos estar cuidando a un padre anciano o un cónyuge discapacitado. Independientemente de nuestras circunstancias particulares, podemos enfrentar un nuevo papel desafiante. Muchos de nosotros no estamos capacitados para este tipo de responsabilidades y nunca anticipamos que estaríamos en esta situación. Es importante que nos demos cuenta de que con la ayuda y el apoyo adecuados, podemos ser buenos cuidadores sin tener que sacrificar nuestro propio bienestar en el proceso.

Ya sea que seamos cuidadores por primera vez o no, los estudios han demostrado que debemos dar varios pasos desde el principio para tener éxito en nuestro papel de cuidador. Necesitamos que:

• Aprenda todo lo que podamos sobre la enfermedad de nuestro miembro de la familia y sobre cómo ser un cuidador. Cuanto más sepamos, menos ansiedad sentiremos acerca de nuestro nuevo rol y más efectivos seremos. Visitar sitios en línea y hablar con profesionales de la salud sobre las necesidades de nuestros seres queridos nos ayudará a comenzar bien.

• Busque otros cuidadores. Hay muchos grupos de cuidado por ahí, y algunos están orientados a enfermedades específicas. Consulte los sitios web de los hospitales y organizaciones locales que atacan una enfermedad, como las asociaciones de Alzheimer, corazón o derrame cerebral, para obtener información sobre grupos de apoyo locales. Es útil y reconfortante dar y recibir apoyo de otros que entienden los problemas.

• Fomentar la independencia de nuestro ser querido. Cuidar no significa hacer todo por nuestro ser querido. Deberíamos mantener la mente abierta y sentirnos libres de utilizar o experimentar con nuevas tecnologías y estrategias que permitan que nuestro miembro de la familia sea lo más independiente posible.

• Conozca nuestros límites. Deberíamos ser realistas acerca de cuánto tiempo podemos dar. Deberíamos establecer límites claros y comunicar esos límites a los médicos, familiares y otras personas involucradas. Deberíamos hacer una lista de las necesidades de nuestros seres queridos, luego determinar qué actividades podemos cumplir (a la vez que somos realistas sobre nuestras capacidades y tiempo).

• Pida ayuda a familiares y amigos. No siempre es fácil pedir ayuda, incluso cuando la necesitamos desesperadamente. Podemos tener miedo de imponernos a otros o preocupados de que nuestras solicitudes sean resentidas o rechazadas. Por otro lado, podemos estar gratamente sorprendidos por la disposición de los demás para contribuir.

Muchas veces, los amigos y familiares quieren ayudar, pero no saben cómo. Si se lo hacemos fácil, pueden responder de manera positiva. Podríamos: reservar un tiempo individual para hablar con la persona; repase la lista de necesidades de cuidado que elaboramos previamente; señalar áreas en las que podrían ser útiles (tal vez una de ellas sea buena en investigación de Internet o asuntos financieros) pregunte si les gustaría ayudar, y si es así, de qué manera; asegúrese de que entiendan lo que sería más útil tanto para usted como para el destinatario del cuidado.

Recuerde que es importante verificar qué tipos de ayuda están cubiertos por el seguro de su ser querido y qué organizaciones voluntarias e iglesias brindan apoyo para el cuidado. En cualquier situación de cuidado, es fundamental para nuestro bienestar aprender sobre todos los tipos de cuidado de relevo y usarlo regularmente.



Instrucciones De Vídeo: Cuerpo y mente saludable - Tips de Salud (Mayo 2024).