¿Qué es la diabetes gestacional?
La diabetes gestacional es una condición diabética que generalmente ocurre durante el tercer trimestre del embarazo. La diabetes es una condición en la que el cuerpo ya no puede utilizar la insulina que produce. La insulina, que se produce en el páncreas, se usa para descomponer los carbohidratos, las proteínas y los carbohidratos complejos, que luego convierten la glucosa en glucógeno. La glucosa o la insulina es el combustible básico con el que funciona nuestro cuerpo. Sin embargo, sin insulina, los niveles de azúcar en la sangre aumentan demasiado y el cuerpo no puede funcionar bien. La diabetes generalmente desaparece después del nacimiento y el cuerpo vuelve a la normalidad. Durante la mayoría de los embarazos de alto riesgo, su médico puede sugerir tal prueba. Esto se hace para prevenir mayores complicaciones con su embarazo. Además, alrededor del 14% de las mujeres embarazadas pueden tener diabetes gestacional, incluso si no están en un grupo de alto riesgo. Los estudios no son exactamente claros sobre lo que desencadena la diabetes gestacional.


Sus posibilidades de contraer diabetes gestacional dependerán si cae en ciertos grupos de riesgo, son aumento de peso, antecedentes familiares de diabetes, tabaquismo, ser un grupo afroamericano, hispano u otro grupo étnico, aumentar de peso antes del embarazo o mayores de 40 años. Generalmente si tiene menos de 25 años, no tiene antecedentes familiares de diabetes ni pertenece a ningún grupo étnico que su médico no le haga una prueba. Sin embargo, un estudio alemán sugirió que todas las mujeres embarazadas se hicieran la prueba. Otros estudios indicaron que si desarrolla diabetes gestacional y toma un anticonceptivo de progestina durante la lactancia, tiene una mayor probabilidad de contraer diabetes tipo 2 más adelante.

Los síntomas principales de la diabetes gestacional son sed alta, micción frecuente y aumento del hambre, sin embargo, generalmente no hay síntomas. Es importante hacerse la prueba durante la semana 24 a la 28. Durante el embarazo, la orina se analiza constantemente, pero la prueba de tolerancia a la glucosa es la única forma de confirmar la diabetes gestacional. La prueba de tolerancia a la glucosa consiste en una lectura inicial de glucosa en sangre. Luego se bebe una mezcla especial de glucosa, en la cual durante un período de ocho horas se analiza la glucosa en sangre. Si la glucosa en sangre es 200, entonces se detecta diabetes.

El control de la glucosa en sangre es muy importante durante la diabetes gestacional. Las complicaciones son presión arterial alta y preeclampsia. La preeclampsia es la presión arterial y las proteínas en la orina progresivamente altas. Los síntomas de preeclampsia son hinchazón, aumento de peso repentino, dolores de cabeza y cambios en la visión. Sin embargo, no siempre hay síntomas. Las principales complicaciones que afectan al feto son defectos de nacimiento, crecimiento excesivo del feto, retraso en el desarrollo pulmonar y la posibilidad de diabetes más adelante en el niño.

Una vez que se diagnostica la diabetes gestacional, se puede manejar fácilmente. Con la dieta y el ejercicio cuidadosamente monitoreado, se pueden controlar los BG. Si no se puede controlar la glucosa en sangre, se administrará insulina para controlar la diabetes. Los medicamentos orales no están indicados para la diabetes gestacional. Además, los diabéticos gestacionales tuvieron una mayor incidencia de cesárea.


Instrucciones De Vídeo: Te explicamos todo lo que sucede con la diabetes gestacional. (Mayo 2024).