Acoso escolar - Señales y prevención

• Abril 28, 2024

Aprender a andar en bicicleta, atar sus zapatos y escribir sus nombres son ritos de pasajes que la mayoría de nuestros niños experimentan. Casi la mitad de nuestros niños también experimentarán bullying en algún momento de su carrera escolar, pero el bullying ciertamente NO es un rito de iniciación.

La intimidación impide el desarrollo social y emocional de nuestros hijos. Puede conducir al suicidio o tener otras consecuencias perjudiciales a largo plazo. Debería ser una prioridad para los padres y las escuelas proteger a los niños del acoso y la intimidación.

Los niños (y adultos) que intimidan a menudo lo hacen porque se sienten impotentes, y acosar a otros los hace sentir poderosos. Un acosador podría ser alguien que experimente peleas y gritos en casa (puede sentirse mal consigo mismo y acosar a los demás es la única forma de sentirse mejor) o puede que no tenga las habilidades sociales necesarias para interactuar con otros niños. No importa la razón, el acoso escolar es un problema que no debe descartarse.

Es posible que su hijo se avergüence de decirle que está siendo intimidado. Un niño que está siendo intimidado puede experimentar bajas calificaciones. Pueden volver a casa de la escuela con objetos personales faltantes. Pueden surgir síntomas físicos como dolores de estómago, dolores de cabeza o náuseas. Pueden tener problemas para dormir o perder el apetito. Es posible que le digan directamente que no quieren ir a la escuela.

La conciencia y la comunicación son las herramientas más importantes en la caja de herramientas de la madre cuando se trata de combatir el acoso escolar. Haga que sea prioritario hablar con sus hijos sobre el acoso antes de que ocurra. Hágales saber qué deben hacer si algo así les sucede. Anime a sus hijos a participar en actividades que les apasionen. Desarrollar su confianza y sentido de identidad ayudará a equiparlos adecuadamente para situaciones de acoso escolar. Participe: en la escuela de su hijo, con sus amigos y con los padres de esos amigos.

Si su hijo está siendo intimidado, lo más importante que puede hacer es mostrar su apoyo. Sea activo en ayudar a su hijo, y a su escuela, a encontrar una solución. Mantenga notas sobre las situaciones de intimidación que su hijo le describa. Ayude a desarrollar habilidades de resiliencia en su hijo y busque orientación profesional cuando sea necesario.

La intimidación es una experiencia difícil de navegar. Muchas mamás aguantan la respiración mientras se despiden de sus hijos en el día escolar. Luchamos con los pensamientos dolorosos de que nuestros hijos sean molestados, excluidos o lastimados por otros niños. Al adoptar un enfoque proactivo y abrir las líneas de comunicación, desarrollar las habilidades de resiliencia de nuestros hijos y proporcionarles las herramientas adecuadas para manejar situaciones difíciles, podemos aumentar las probabilidades de que nuestros hijos no sean víctimas de la intimidación.

Instrucciones De Vídeo: ¿Cómo prevenir el acoso escolar o bullying? - Al Aire con Paola (Abril 2024).