Cómo avanzar tu vida, después de la muerte
En mi experiencia, hay dos cosas que le suceden a una madre o un padre cuyo hijo pequeño acaba de morir:

En primer lugar, en la inmediatez de la pérdida está el dolor agudo. Sufres un dolor tan intenso que ya no puedes sentir ni sentir nada más que la verdad inmediata, incomprensible y aterradora de que tu pequeño se ha ido, se ha ido ... y siempre se habrá ido. Esta realidad instantánea es tan insoportable que la mente lucha por darle sentido. Algunos padres afligidos lloran sin cesar, incapaces de otra cosa que no sea esta efusión incontrolable e imparable. Otros lloran, pero luego desaparecen silenciosamente en sí mismos: el mundo externo se vuelve sin importancia e irrelevante. Luego, algunos, como lo que me pasó, van a la deriva entre ambos. Recuerdo llorar tan desesperadamente cuando finalmente miré a mi hijo, que acababa de morir mientras lo miraba y lo abrazaba. Esta emoción era tan cruda que siempre me asustaba. Pero también recuerdo el día después de enterrar a mi hijo. Yo y mi pareja, la madre de Craig, estábamos sentados solos en la casa cuando mis padres y mi hermano llegaron a la puerta. Entraron y nos sentamos todos frente a la TV, que estaba encendida únicamente para dispersar el silencio apremiante. Todo lo que puedo recordar de esa visita fue que no tenía nada en mí. No tuve conversación. No tenía nada que decir Tenía una expresión en blanco en mi rostro y no me importaba. Después de poco tiempo, mis padres y mi hermano, que entendieron por completo, se excusaron, y después de reunir una pequeña disculpa innecesaria, se fueron cortésmente. Este estado no es un estado de entumecimiento, porque te sientes. Es más un vacío y una sensación de que has salido de este mundo y estás afuera mirando hacia adentro. No sabes qué hacer o pensar.

Luego, junto con este dolor (y en su propio tiempo), viene el único pensamiento verdadero, importante y avanzado: ¿Dónde está mi hijo? Esa pregunta es una búsqueda del significado de la vida; una búsqueda de propósito en medio de toda la locura, el dolor y la angustia. ¿Cómo puedes dar vida, amar, hacerte amigo, reír, cuidar e invertir todo de ti en alguien que, en un instante, ya no existe, ni volverá a ser? No puedes, es la respuesta. Esta tragedia en tu vida te abre los ojos a un mundo más grande. SABES, inmediatamente, que tu hijo simplemente se ha mudado a algún lugar, a algo, a lo que sea, y esto comienza tu viaje en el camino hacia la verdad.

Este viaje, ciertamente para mí, es el único camino para salir de todo el dolor. Esta búsqueda de significado, en sí misma, da sentido y propósito a mi vida y la vida de muchos otros padres, estoy seguro, que han perdido a sus hijos. Es un viaje llevado con el dolor más horrible pero guiado por el gran vínculo del amor. Es una forma retorcida y sinuosa con la esperanza de tu único compañero: la esperanza de la verdad y la esperanza de abrazar a tu pequeño una vez más.

Instrucciones De Vídeo: EXPERIENCIAS DESPUES DE LA MUERTE *tu vida pasar como una pelicula. (Mayo 2024).