Frente al lienzo en blanco
Pintar puede ser una experiencia frustrante para el principiante. Un paseo por los pasillos de cualquier tienda de artesanía, arte, mejoras para el hogar o ferretería es probable que resulte en un caso grave de agobio. Por lo tanto, es importante comprender cuáles son sus objetivos antes de comprar.

Primero, pregúntate en qué quieres pintar. Las superficies a menudo dictan lo que se necesita. Por supuesto, el costo siempre es un factor. El hecho de que un producto sea caro no significa que sea el mejor para elegir. Se necesitan varios artículos para pintar. Los pinceles, imprimación, pintura y suministros de limpieza dependen del proyecto que tenga en mente.

Un buen lugar para encontrar instrucción es el cuarto de niños de su biblioteca pública local. Los libros para niños son para principiantes y son fáciles de seguir. También tienden a requerir suministros de bajo costo, lo que los hace amigables con el presupuesto. A medida que aumentan sus habilidades, puede avanzar a una instrucción más compleja o tal vez simplemente seguir donde su creatividad lo lleve.
Lo importante es comenzar. Todos son principiantes cuando prueban algo nuevo. Es útil tener un diario de arte para que pueda ver su progreso. Prefiero una libreta de medios mixtos en espiral. Se encuentra plano y el papel retiene muy bien el medio húmedo.

Crea una tabla de pintura. Al comenzar con un nuevo conjunto de pinturas, cree una tabla de colores haciendo un trazo de cada color en la página para que no se sorprenda del color cuando comience a crear. Pintar en las paredes será más fácil si coloca una mancha de color de 3 pulgadas por 3 pulgadas en diferentes lugares con diferentes luces. Si se siente ambicioso, puede crear versiones del color agregando blanco para crear un color más claro, negro o gris para crear uno más oscuro.

Sepa que es probable para el verdadero principiante que las ideas para obras de arte personales no salgan de su cabeza de inmediato. Haz de la pintura un hábito. Hazlo todos los días durante al menos cinco o diez minutos. Al final de una semana con un hábito de diez minutos, tendrá más de una hora de tiempo de pintura. Incluso si la pintura es remolinos y manchas, desarrollar tu músculo creativo es un paso hacia un hábito.

En última instancia, el objetivo es disfrutar del proceso, los materiales y el proceso meditativo de creación. No hay juicio, solo expresión creativa. Quién sabe, tal vez crearás una obra de arte digna de una galería. Pero si no lo hace, habrá aprendido un hábito que le traerá mucha alegría en los años venideros.

Instrucciones De Vídeo: ALMAGRO, FRENTE AL LIENZO EN BLANCO (Marzo 2024).