Condones y ETS
Más de 50 millones de estadounidenses están infectados con una ETS o enfermedad de transmisión sexual.

Si bien el uso de condones es un método muy efectivo y responsable de protegerse a sí mismo o a su pareja, contra las ETS, no es cien por ciento efectivo, y con algunas enfermedades ofrece poca protección.

Al igual que con el embarazo, los condones pueden fallar en la protección contra enfermedades de transmisión sexual, incluso cuando el condón se usa correctamente y no está vencido ni dañado. Esto se debe a que no todas las ETS se transmiten a través del fluido corporal.

Hay ETS que pueden transmitirse a través del contacto de piel a piel, y eso incluye la piel en cualquier parte del cuerpo, y no necesariamente, la piel cubierta por los condones.

No ayuda que las ETS no siempre muestren síntomas, o que algunas puedan permanecer latentes en el cuerpo y activarse varios meses o años después de la infección real.

Las úlceras genitales que causan enfermedades como el VPH (virus del papiloma humano) o el herpes pueden transmitirse de persona a persona en la piel de una pareja infectada, incluso en los casos en que se usan condones el cien por ciento del tiempo.

Lo mismo se aplica a los piojos púbicos, comúnmente llamados cangrejos y piojos del cuerpo, también conocidos como sarna.

El VPH es la ETS más comúnmente transmitida en los Estados Unidos, y algunas cepas pueden causar cáncer de cuello uterino.

Eso no significa que los condones no sean una herramienta vital para una buena salud sexual. Lo que sí significa es que, además de usar siempre protección, debe tener chequeos regulares con su médico y ser proactivo en la selección de sus parejas sexuales.

Eso puede ser especialmente difícil, cuando no puede diagnosticar a alguien basándose únicamente en su juicio sobre su aspecto físico o su salud.

En 1993, la FDA aprobó otra herramienta, el condón femenino que nos ayuda a mantenernos seguros y saludables. Por supuesto, no es cien por ciento efectivo en ETS o prevención de embarazo, pero puede ofrecer aún más protección contra ETS que el condón masculino.

Los estudios demuestran que brinda mayor cobertura a las áreas del cuerpo comúnmente afectadas por las ETS, además de tener más durabilidad y calidad en la construcción que el condón masculino.

Cuando se usa en combinación con el condón masculino, el sentido común, la discreción sexual y las visitas regulares a su médico, es lo más cerca que hemos llegado hasta ahora de completar la prevención de enfermedades de transmisión sexual.

Instrucciones De Vídeo: El preservativo evita la clamidia (Abril 2024).